Como ya os sabéis si me seguís por las redes sociales, la televisión que consumo se limita básicamente a ver series. Por eso, para mí, Netflix ha supuesto un antes y un después en mi vida. Eso de tener un catálogo de temporadas completas de un montón de series a mi disposición es el cielo en la tierra. Además, me ha dado la oportunidad de ver series que, a priori puede que no hubiera llegado a ver.

Así que ahora mismo he visto (o estoy viendo) esto:

  • Los 100. Empiezo fuertecito. Serie adolescente, aunque las apariencias engañan y es más que eso, y con alto componente de suspense y ciencia ficción. La empecé a ver porque no encontraba nada mejor, pero al final he terminado completamente enganchada. Sé que hay spoilers potentes pululando por ahí, pero estoy a la espera de ver la tercera temporada, así que prefiero no leer nada.
  • Bloodline. Posiblemente la serie que más me ha sorprendido de Netflix. Un reencuentro entre hermanos que se complica muchísimo y con los paisajes de Los Cayos de Florida de fondo. Y yo, que soy cero veraniega, he deseado vivir allí.
  • Luther. La mejor, sin duda. Además, han tardado muy poco en ofrecer la última temporada. Serie policiaca con un personaje carismático y episodios cuya trama suele cerrarse en un par de  episodios de infarto. Hasta tal punto me gusta que suelo ver dos veces cada uno.
  •  The Last Kingdom. Serie de vikingos que resulta tan entretenida que se hace verdaderamente corta. Mucha acción y un personaje que alegra bastante la vista. Todo bueno, vaya.
  • Jessica Jones. Soy distinta a la mayoría de la gente, que ha preferido Daredevil. Me costó cogerle el gusto, pero me enganché hasta el punto de irme a la cama con el iPad para ver un episodio más. Además, el malo es Doctor Who y eso mola mucho.

Hay varias más, así que posiblemente os haga otro post sobre ello. Y, aunque he mencionado Luther, tengo pendiente un post sobre series inglesas, que se han vuelto imprescindibles para mí.

¿Y vosotros, os habéis hecho adictos a Netflix?