Cambiando…

Sin apenas darme cuenta, en poco tiempo he experimentado varios cambios.

Supongo que ha sido como un punto de inflexión después de mucho tiempo de estar siempre igual.

Os cuento:

• Me he cortado el pelo. Después de mucho pensarlo, de sopesarlo tal y como os conté aquí, por fin he sido valiente y me he cortado el pelo. Quitando la cara y el rubio, ha quedado algo así:
  

El detonante han sido las últimas semanas en las que, por más que me esforzaba, no había modo de verme bien con el pelo largo. No tenía tiempo de llevarlo liso, que era como mejor me veía, porque esa tarea es incompatible con dos niños pequeños. Así que busqué entre mis fotos y me di cuenta de que he llevado este corte más que ningún otro en mi vida. Así que, ya está está hecho. Espero no arrepentirme….

• He dado clases de automaquillaje. Mi querida Saraialma, que es maqulladora, me ha dado algunas pautas para aprender a maquillarme, sobre todos los ojos. Estoy encantada con lo que he aprendido. Me he dado cuenta de que, con un poco de práctica y dejando de tener miedo a probar se pueden conseguir resultados asombrosos y también he visto que no se tarda demasiado en hacerlo, cosa que en mi caso es muy importante. Y lo muchísimo que cambia la cara con solo algunos trucos. ¡Ahora estoy deseando probar cosas diferentes!

Ahora veo esto y sé que no es tan difícil hacerlo

• He comenzado una dieta. Esto es lo que más problemas me ha acarreado. Comencé la dieta que había hecho siempre y al no ver apenas resultados, decidí prescindir de los hidratos de carbono para acelerar el proceso. ¡Terrible error! Debido a la cetosis (reacción del cuerpo al ser anulados los hidratos de la dieta) me puse malísima hasta el punto de que mis tareas cotidianas se convirtieron en algo que no podía llevar a cabo. Me dijeron que pasaría en un par de día pero yo no tengo ese tiempo con un niño pequeño al que cuidar. He vuelto a mi dieta. No he perdido demasiado peso pero sí volumen y la seguiré como pauta de alimentación aunque sea más lenta. En esto, más que en nada ¡las prisas no son nada buenas!

No puedo renunciar a la pasta. Es un hecho

• He renovado mi vestuario. Eso ya os lo conté aquí. Al fin he llegado a la conclusión de que, aunque existe ropa maravillosa en las tiendas, hay prendas que no daré uso dada mi vida actual. He buscado la comodidad: zapatos bajos bonitos, pantalones cómodos pero que sientan muy bien, blusas largas pero favorecedoras, hasta un bolso alejado de los canones actuales pero imprescindible cuando tienes un niño al que coger y llevar. Es lo que toca ahora, y hay que hacer lo propio en estos casos.

los zapatos nuevos que me compré en Asos

Creo que para comenzar el año, han sido bastantes cambios…

Fotos: Mediabistro, anamaqui35,  Ratita Presumida