HM mathew williamson

Durante estos días he leído muchos posts referidos a la nueva colección lanzada por H&M de las llamadas “de diseñador”. Y me ha dado por pensar…

La idea no puede ser más inteligente: un diseñador de prestigio diseña una serie de piezas que sólo se venderán en tiendas “seleccionadas”.  La campaña de marketing se inicia varios meses antes con rumores sobre quién será el diseñador, la revelación de éste, pequeñas pinceladas de la colección que, ya picados por el gusanillo de la curiosidad devoramos sin freno, presentación oficial, varias celebrities se pasean con el vestido fetiche y los fashionistas de medio mundo llegaremos a tener tantas ganas de tener algo de la colección que haremos locuras como esperar horas a la cola de las tiendas seleccionadas. La colección está vendida antes incluso de ponerse a la venta, lo que supone una excelente inversión para la marca y también una enorme publicidad para el diseñador ya que sus prendas se democratizan llegando a lugares donde nunca pensó que llegarían y creando futuras fans de sus diseños.

Todos ganan ¿o no?

Porque se supone que esta colección “capsula” será mucho más económica que una pieza salida del taller del diseñador, con lo que el consumidor medio puede tener “algo de diseñador” sin tener que arruinarse.

Aunque ya he contado mil veces mi experiencia con estas colecciones, no está de más recordarlo. He ido a comprar las colecciones de Stella McCartnety, Viktor & Rolf y Roberto Cavalli.

La de Stella McCartney me pilló prácticamente por sorpresa, de esto de “pasaba por aquí” y me hice con un top y una bufanda. Los he usado muchísimo y aún siguen en mi armario dándome un gran uso.

En la colección de Viktor & Rolf  sí hubo más guerra, pero aún así, siguió siendo algo relativamente tranquilo. Compré una falda, una camiseta y un vestido. La camiseta y el vestido sí los he utilizado. La falda aún está sin estrenar.

Con la colección de Cavalli se desató la locura. Había gente desde las ocho de la mañana y al abrir las puertas hubo una especie de histerismo colectivo del que no sé muy bien cómo salí viva. Viva y con media colección, todo hay que decirlo. No digo todo lo que compré porque sería más rápido decir lo que no compré.

RCavalli H&M Con Cavalli llegó la locura ¡Y yo estuve allí!

De toda esta experiencia no sé si saco la sensación de que mereció la pena o de que no lo hizo en absoluto. Lo que sí sé es que en estos casos, la adrenalina juega malas pasadas y cuando llegas allí y lo ves todo, ves a la gente acaparando cualquier cosa con tal de llevarse algo, te dejas tú también llevar y te vas a casa con muchas más cosas de las que tenías pensadas en un primer momento.

En cuanto al tema de barato o caro, pues es bastante relativo y para muestra, un botón. En la colección de Cavalli compré un pantalón negro pitillo. Me costó 59 euros y aunque me quedaba un poco grande me lo he puesto bastante. Eso sí, aunque el corte sea de Cavalli, la calidad es de H&M, con lo que el tinte del pantalón desteñía y las primeras veces terminé con las piernas negras tras ponérmelos. Ahora, dos años después, me he comprado en yoox, en las sample sales (de las que hablaré otro día porque merecen un post por sí mismas) un pantalón de Roberto Cavalli por prácticamente el mismo precio. El corte y la tela no tienen nada que ver con los de H&M, la verdad.

¿Merece entonces la pena este tipo de colección? Para mí, este año al menos, no. Sé que si fuera (no puedo por razones personales, así que ni siquiera me lo planteo) terminaría comprando más de lo que quiero y frustrada porque lo que busco ni siquiera está allí (que ya pasó en la de Cavalli, que no la trajeron completa).

Además, el hecho de que presente una segunda colección en todos los H&M me hace desistir totalmente de la guerra. Iré el día 14 de Mayo al H&M de mi barrio, que estoy segura de que estará vacío y me probaré tranquilamente todo lo que quiera. Supongo que esta segunda colección funcionará como ya lo hizo la de Madonna. Al comprar ésta, recibí un trato exquisito por parte de las dependientas que habían puesto ad hoc para cuidar de la colección. Me sentí como en una boutique, nada que ver con las colecciones de diseñador, en la que me sentí como ganado (porque, todo hay que decirlo, te tratan fatal).

HM matthew williamson

Mejor yo me espero a ésta… 

Y vosotros:

¿Qué opináis de este tipo de colecciones? ¿Verdaderamente merecen la pena?

¿Tenéis la cabeza fría u os dejáis llevar por la emoción del momento?

¿Iréis a la primera colección o esperaréis a la segunda?

Estoy impaciente por ver los posts de las chicas guerreras….