Hay una serie de básicos que siempre están en mi armario. Por desgracia, no son prendas de fondo de armario porque se trata de prendas que tienden a estropearse con facilidad así que tengo que ir renovando cada cierto tiempo.
En épocas de rebajas, aprovecho para renovar estas prendas y así siempre procuro tenerlas impecables y darles mucho uso.
Mis básicos cíclicos son:
- Camisa blanca: indispensable, no sé pasar sin ella. He procurado añadirle también otra en azul o rosa claro pero no funciona. Tiene que ser blanca. Va absolutamente con todo, bien debajo de un jersey o una chaqueta, o sola con unos pantalones de vestir o unos vaqueros. Con el uso y los lavados va cambiando un poco de color y deja de tener el efecto “ropa impecable” que tiene que tener esta prenda. La suelo renovar cada seis meses.

- Camiseta negra y camiseta blanca: lo mismo que con la camisa blanca, no concibo mi armario sin ellas. Procuro que sean de algodón y no queden demasiado ceñidas. Si me las compro en una tienda low cost, busco que sea varias tallas mayor a la que suelo usar porque suelen encoger y porque si tiene un mal corte, la anchura lo disimula.

- Chaqueta de punto negra: en diferentes formas y largos, suelo tener varias que voy alternando. También suelen estropearse mucho con el tiempo así que me toca renovarlas cada temporada.

- Vaquero lavados: Indispensable. No lo renuevo tanto como las prendas anteriores pero sí suelo comprarme uno al año.

- Vaquero negro: antes no usaba demasiado esta prenda pero ahora me he vuelto adicta. Quedan bien con todo y el efecto “adelgazamiento” es impagable. Lo malo es que los lavados van acabando con su color y al final adquieren un tono indefinido que hace que dejen de gustarme. Suelo tener varios en mi armario y también he aprovechado las rebajas para comprarme unos.

- Bailarinas/Slippers: este tipo de zapato suele estropearse con más facilidad que otros por su poco tacón y por el uso que los doy. Estas rebajas no he comprado ningunos porque prefiero esperar a que llegue la primavera y hacerme con algunos.

- Ropa interior: la época de rebajas es una buen momento para revisar nuestra ropa interior y hacernos con prendas con grandes descuentos. Porque no nos engañemos, la ropa interior es cara y cualquier descuento viene bien. Yo suelo hacer renovación cada seis meses aprovechando estas fechas. Mi marca fetiche, Calvin Klein, hace unos descuentos que merece la pena aprovechar.

- Un bolso básico: no sé si se puede clasificar como cíclico, porque un bolso generalmente no se estropea pero sí me gusta aprovechar las rebajas para comprar un bolso que será el que más use en la temporada siguiente. Me suelo cansar de ellos con facilidad así que el que vengo usando lo guardo y uso el nuevo. Cuando me apetece, echo la vista sobre el que usé y quizás me vuelva a apetecer usarlo.

Renovando una serie de prendas básicas, nos parecerá que tenemos un armario nuevo y también daremos más uso a las prendas de temporada.
Yo soy una auténtica ‘devoradora’ de camisetas de algodón blancas, las utilizo tanto que siempre tengo la sensación de estar comprándolas. Y ahora en rebajas más! 😉
Un saludo!!
Yo son adictas a las camisetas blancas!! Y que razón tienes con los vaqueros negros, estas rebajas no he comprado ninguno,
Coincidimos!! sí, sí, con eso ya tienes el armario solucionado. Para los pantalones negros, un truquito: tinte Iberia!! de vez en cuando le doy un lavadito con él y me duran más.
Me apunto el truco!
Yo el tema de ropa interior lo llevo fatal. Cada rebajas compro un monton y luego acabo poniendome lo mismo hasta que se estropea asi que tengo un monton de lenceria casi nueva jajajaja. Lo de la camisa blanca a mi no me engancha, no suelo tenerla en mi armario pero el tejano negro es imprescindible!!! para todo!! 😀
Yo sobre todo camisas blancas!
http://nollorespatito.blogspot.com.es/
Pues la verdad es que haciendo repaso…creo que no falta nada de eso en mi armario tampoco! Lo que pasa es que no a todo lo mencionado arriba le doy tanto uso como para tener que renovarlo periódicamente. Me explico, me gusta tener una camisa blanca, una rebeca negra, básicas de ambos colores, etc. y me las pongo…pero sólo de vez en cuando. En contra de lo que cabría pensar precisamente por ser “básicos”, no los llego a llevar tan a menudo como para desgastarlo, lo que no quita que si alguno se estropea no pare hasta reponerlo, ni que sea “por si…”, porque por alguna extraña ley, como te falte un día la camiseta negra básica seguro que tienes la imperiosa necesidad de ponértela y nada, nada, nada, la puede sustituir 😉
Saludos!
María