El sábado estuve de compras. Llevaba dos ideas claras: comprarme cosas que pudiera llevar ya (nada de chaquetas de cuero ni botas mosqueteras) y no caer en la tentación de las ultimísimas rebajas. Para ello había hecho una lista con las prendas imprescindibles sin las que mi vida no tendría sentido y me había mentalizado a conciencia.

Evidentemente, no cumplí con ninguna de mis promesas. Me compré una chaqueta que, aunque es tendencia de la próxima temporada (estampado de leopardo) rompió de golpe mis dos objetivos: siendo de manga larga, ahora mismo, con la que está cayendo por las calles, no hay ser humano que se la coloque (bueno, esto tiene sus matices, y luego diré  porqué) y encima, era de las últimas rebajas (me costó tan poco, que siento vergüenza al confesarlo)

Pero eso sí, me ha parecido una compra estupenda y estoy muy contenta. Ahora sólo queda esperar a que llegue un poco de fresco para poder estrenarla (¿se acabará el verano algún día o estaremos así en diciembre? Empiezo a tener mis serias dudas)

chaqueta print leopardo

Mi chaqueta es de tela, pero el estampado es parecido 

Pero, puestos a seguir las tendencias, esta mañana he encontrado a una chica a la que, sin dudar un instante, voy a nombrar mi heroína particular. Me explico: era una mujer de unos treinta y pico (soy mala calculando edades así que puede que tuviera más), con un tipo de escándalo y…

 

¡CON PANTALONES DE CUERO!

Quítala la chaqueta y la chica iba tal cual

En serio, ha sido verla y he sentido un cúmulo de sensaciones encontradas. Por un lado he sentido admiración y envidia porque, yo, que estoy deseando estrenar todo lo que me ha comprado de otoño, no tengo el valor torero de colocármelo aún, pero por otro, me ha dado tantísimo calor verla, que a poco caigo al borde de la lipotimia (que yo soy como una dama del dieciocho, que me caigo redonda a la mínima. Si queréis os lo cuento otro día).

Por si fuera poco, ahora siento una sensación similar a la frustración. Porque ya puedo yo ser la más modelna del barrio, ya me puedo leer todas las revistas de moda del mundo mundial, ya me puedo conocer al dedillo todas las tendencias que….

 

¡¡¡¡YA NO SERÉ LA PRIMERA EN MARCAR TENDENCIA!!!!

¡Feliz semana!