guerlain homme

Esta foto la pongo porque sí, porque el chico lo merece

Si hay que encontrarle alguna ventaja a la tan traída y llevada crisis, y es que hay que ser positivo hasta en los peores momentos, es el hecho de plantearnos cosas que antes hacíamos sin pensar. Hace unos años, si por ejemplo, necesitabas un pantalón (y conste que pongo necesitabas en cursiva, porque el tema de las necesidades, al menos en mi caso, es algo bastante relativo), pues te ibas a Zara o similar y hacías acopio sin el menor remordimiento. Ahora no. Ahora, antes de comprar, miras en el armario a ver si hay algo que te cuadra, y oh, sorpresa, puede que incluso descubras trapos que tenías olvidados y de los que puedes hacer aún un buen uso (de hacer la compra en el propio armario ya hemos hablado en otras ocasiones, pero no está de más recordarlo).  Y es que no existe mayor alegría que encontrar algo que no recordabas, sin necesidad de gastar un euro.

Otro tanto similar ocurre con los productos de cosmética. Ya podías tener veinte muestras en tu casa, que sin ni siquiera verlas, te ibas a la perfumería de confianza y arrasabas sin pudor todo aquello que te cuadrara en el momento. Era terapéutico, pero también era un modo estupendo de ir a la ruina.

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¡Qué tentación, todo tan colocadito!

Ahora no. Yo, que soy la mar de apañada, he colocado todas mis muestras, las he separado por productos y de momento, hace un tiempo que no tengo que ir a comprar nada nuevo. Tengo un neceser grande, en el que he colocado unas bolsitas separadoras y allí tengo, desde limpiadores hasta sérum. ¿A que valgo un potosí? Lo dicho, la crisis agudiza el ingenio.

Lo malo de esto es que, de tanto ver los productos propios, una se termina aburriendo y también termina acabando con todo su arsenal o al menos, fallando en aquellos productos a los que da un mayor uso. Es en estos casos cuando hay que comenzar la operación “Asalto del neceser masculino”.

Y es que, no sé porqué extraña razón, cuando vamos a una perfumería, aunque sea yo la que se deja el sueldo, me llenan la bolsa de muestras masculinas, lo que me lleva los demonios. ¿Cómo puedo gastarme doscientos euros en colonias y maquillaje y que la dependienta sólo me dé muestras de crema para la zona pectoral  (lo cual no sé muy bien cómo tomármelo) y el resto sean colonias y cremas masculinas? Pues tengo que tomármelo con deportividad, no me queda otra.

Y como sé que al marío, eso de las cremas le va como que regular, pues si yo no tengo de las mías, y el tiene el cajón lleno de muestras, antes de comprar, miro a ver qué encuentro.

Y sí que encuentro. Hace un par de meses, acabé con mi contorno de ojos. El contorno de ojos es un  producto vital para mí, aunque a cualquiera le pueda parecer secundario. No es que me llene de arrugas en esa zona, es que soy alérgica a muchos maquillajes, y no concibo tocar esa zona sin estar protegida por el contorno. Miré en mi neceser pero no tenía ni producto, ni muestras. Y me fui a visitar el cajón del marío. Había varias muestras de Clinique y me las llevé. La verdad es que me daba un poco de miedo, no sé porqué tenía la idea de que sería un producto más fuerte que el femenino y me haría reacción. ¡Nada más lejos de la realidad! Me ha ido de cine, hasta el punto de plantearme comprarlo cuando finalice la muestra.

 

                    clinique age defense

Otro tanto me ocurre con las colonias. Estoy convencida de que existen colonias masculinas que buscan una clientela femenina. Estas navidades me enamoré de One Million. No sé si sería el anuncio o el olor lo que me convenció primero, pero no he parado hasta tener un frasco en mi estantería. Ésta la hemos comprado el marío y yo a medias.

 

         one million perfume

¡Me encanta cómo baila este chico!

 

Y, tras mi rollo macabeo, ahora toca la ronda de preguntas:

 

¿Vosotros habéis asaltado alguna vez un neceser del otro sexo para surtiros o sois de los que pensáis que cada producto está diseñado para el sexo al que se destina?

¿Qué productos del otro sexo os han sorprendido para bien (o para mal)?

¿No créeis que en el fondo, son el mismo producto y lo que cambia es el envase? (esto lo creo yo, que soy muy de la teoría de la conspiración, pero no está de más ver que opina el resto del mundo)

Contadme…