Las creó un médico, Klaus Maertens, durante la Segunda Guerra Mundial, buscando unos zapatos del ejército más cómodos para curar su pie herido mientras esquiaba en los Alpes. Tomó cuero de un zapatero y les buscó un material para crear unas suelas que amortiguaran los golpes. Para estas suelas encontró caucho desechado de los aeródromos. En ese momento, comenzó a comercializarlas y resultaron especialmente cómodas para mujeres por encima de los cuarenta años.
Como el negocio comenzó a tener éxito y empezaron a recibir pedidos internacionales, decidieron cambiar el nombre Maertens por el más comercial Doc Martens.
Las primeras botas Dr. Martens salieron el 1 de abril de 1960, con diseño rojo cereza, cuero de Napa y ocho ojos para meter los cordones. Eran populares entre trabajadores como carteros, policías u obreros de fábricas.
A partir de los años sesenta fueron tomadas como uniforme de los skinheads.
En los años noventa, fueron símbolo para la estética grunge, hasta el punto de tomar la imagen de Kurt Kobain en una campaña publicitaria.
Incluso el Papa Juan Pablo II las utilizó en multitud de ocasiones, encargadas a medida, y en color blanco.
Las fotografías que ilustran el post han sido tomadas de thefashiontime y pertenecen a una revisitación de las Doc Martens realizada por diferentes artistas, como Lulu Guinness, Orla Kiehly, Vivienne Westwood o Sean John.
Creo que, con este revival continuo que vivimos, va siendo hora de hacerse con unas…
No sé si sicumbiré a la magia de las Dr Martins otra vez, creo que en la época del insti tuve suficiente. Tuve varios colores y no me las quitaba ni con el pijama -fueron mis fieles amigas de la adolescencia. Recuerdo que las primeras me las compré en Londres, que resultaban bastante más baratas que aquí, así que pasé me primer agosto con mis adoradas, mi madre casi me mata.
Yo llevo un tiempo buscando unas que me apañen. La verdad es que ahora me arrepiento de no habérmelas comprado en Nueva York, donde estaban por todos lados y de todas las formas y colores, pero bueno tampoco me quitan el sueño.
No sabía de esa historia tan bonita del nacimiento de esas botas.
Besitos
No sé que ha pasado, pero yo ya había comentado aquí.
En fin te decía que me arrepentí de no comprármelas en Nueva York, allí estaban por todos lados, de todas formas y colores.
Una historia muy bonita la de su nacimiento, si señor.
Besos
Ups, ahora veo los dos comentarios. En fin, paro ya que te voy a saturar el wordpress!jejeje
qué interesantes las reinterpretaciones!
yo la verdad es que no me veo con ellas otra vez. ya las tuve a los 14 pero ahora no me siento identificada con ellas…
genial la historia. un besito!
dónde están las mías?????!!!!, te ‘pido prestadas’ las de lulu guiness….. gracias ratita, y precioso el post. en cuanto las encuentre o -me compre otras si no queda más remedio- con qué me las pongo? un XX! enorme
modamola: ¡Vaya, unas martens en agosto! Eso sí que tiene mérito.
thesil: yo creo que las miraré en Londres, a ver qué tal me veo con ellas, aunque no sé… Y tranqui por los mensajes, wordpress tiene vida propia a veces, jaja.
Cris: me parecieron originales, por eso les he dedicado el post.
humming: claro, tu coge, jaja.
¡Besos para todas y gracias por la visita!
Ai esque yo se las veo a otras persnas y me gustan, sin embargo en mi no…ya sabes que eso con algunas prendas suele pasar!!!
UNBESOOOO
Jajaja, todavia me acuerdo cuando se pusieron de moda y todo el mundo las llevaba con vaqueros negros o grises.
Al final todo vuelve, hasta las hombreras!!
Besos
Bea
Qué fascinantes son las botas Martens.
Siempre he querido unas, se ven maravillosas con todo. 😀
un saludo (y gracias por pasar por mi blog)
Qué tiempos aquellos en los que mi madre no me dejaba comprármelas…y consiguió que nunca tuviera unas, va a ser que es tiempo de hacerse con un par aunque sea para fastidiar.besoo!
Me apunto a las lentejueleras!!! Viva!
Yo, que soy de las que nunca tira nada, todavía tengo las mías en negro desde hace como 10 años ¡y me sirven! Yo también luché contra mi madre para comprarlas, porqué le parecían un horror.
En serio el Papa tenía Martens en blanco? jaja
Besos
LaRa: sí, la verdad es que no van con todos los estilos. Tendría que vérmelas puestas para saber si me animo o no.
porquemelomerezco: es que no había nadie que no se animara, fue tremendo. Y espero que lo de las hombreras sea solo un rumor, jaja.
Aldorado: gracias a ti por visitar el mío, guapo.
schunchie: jajaja, eso, que a las madres siempre las fastidian mucho según que cosas, por muy mayores que seamos ya (y eso no quiere decir que seamos unas viejas, eh?)
Planeta Isabelino: viva, viva!! Y neni, gracias de nuevo por lo de ayer, prometo ponerlo en el próximo
núria: jo, qué suerte tenerlas aún. Yo tuve zapato, no bota y la verdad es que me encantaría probarlas, a ver si es verdad que son tan cómodas. Y lo del Papa, es cierto, como le gustaba mucho andar y ya estaba viejito, dicen que era con lo que más cómodo iba.
¡Besos para todos y mil gracias por los comentarios!
q xulo todo!!!me encanta!!bS
A mi la verdad es que las Doc Martens no me gustan naada de nada, pero ha sido muy interesante leer su historia.
Un beso!
Me he comprado unas gris clarito para llevar dobladas y la parte interior es… rosa!! Juassss, y encima me las quiero poner con vestiditos. Ya veremos, igual hasta las devuelvo.
Yo creo que tambien voy a hacerme con unas. Me gustan mucho! Y me ha encantado la historia y las fotos.
Un besote
hoooo con post tan lindos, hasta se antojan… jaja
Si, creo que si. Revival!
Me ha encantado que nos contaras la historia de estas botas tan famosas. Yo, la verdad, es que nunca caí en esa tendencia, las veía de gente agresiva y yo era muy ñoña por aquél entonces, más pijita que fashion, ja, ja, ja!!!!
La verdad es que ahora me gustan las de color vino para hacere combinaciones arriesgadas, estilo grunge, vamos… seguramente acabaré haciéndome con unas en breve…
Besos guapa!
¡¡¡Qué interesante!!! no sabía lo del Papa ¡muy interesante!
Un besote
Yo tuve un par en color amarillo desgastado allá por el año 95, muy chulas, aunq no sé si volveré a comprarme un par… no me llaman la atención como lo hacían antes, aunq nunca se sabe…
Por cierto, una historia muy interesante, no tenía ni idea de cómo habían surgido.
Un beso!!
Me han encantado siempre, pero hay que reconocer que eran un poco duras.
Besitos
Vivi
Ciao ratita,buenísima labor documental,mi enhorabuena.Al parecer en el Reino ya llevan tiempo siendo “tendencia” aunque los “básicos” estan todos de regreso a marchar forzadas en todas las firmas. Lo que no me convence de Martens es su reciente subida de precios compensada con una bajada de la calidad de materiales,cosas del mercado que esta loco jajaja.
Baci per te cara,ci vediamo.
Qué curioso, un médico revolucionando el mundo de la moda. A ver si yo algún día consigo hacerlo, ya que somos de la misma familia profesional. ¡Vivan los fashion-doctors, jaja!
Un beso linda!
Me gustó este infore a ver si me acuerdo de venir a buscarlo cuando lo necesite.