Llevo desde que vi la primera colección con la idea de comprar un Zubi. Me encantó su diseño y su originalidad. Confieso que me echaba atrás el hecho de que, siendo una cartera, me daba la sensación de que no iba demasiado con mi vida (tener un niño de dos años te hace necesitar dos manos y, a veces, incluso más). Ya tengo otras carteras y al final terminaban guardadas en el armario porque me resultaban incómodas.

Pero aún así me parecía tan bonito que no se me iba de la cabeza. 

Al final la semana pasada me decidí. 

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Como me era imposible pasar por el showroom de Mer, hice el pedido en su tienda online y os tengo que decir que funciona genial. Al día siguiente lo tenía en casa.

No puedo estar más contenta con mi compra. He comprado el pouch Mosteiro y además de ser una preciosidad, está realizado en una lana maravillosa y tiene unos acabados espectaculares. Y además, me está resultando comodísimo porque, a diferencia del resto de las carteras, es muy flexible, caben muchísimas cosas y te permite llevarlo en la mano o sujeto con el brazo y al final, es más práctico que un bolso con las asas cortas. Como ejemplo os diré que lo estrené un día con mucha lluvia, así que tuve que ir con el Zubi y el paraguas, y no eché en falta un bolso bandolera.

Vamos, que se nota que estoy emocionada con mi compra. 

Sé que lo voy a utilizar mucho porque combina con todo así que creo que es el capricho más consecuente que he podido tener.

*Foto tomada por mí