mano bebe

Aunque la mayoría ya lo sabéis, el pasado seis de agosto nació al fin mi bebé. Fue un parto duro y complicado pero mereció la pena cada segundo.

Es un bebé grande (pesó cuatro kilos 320  gramos y midió 53,5 centímetros, esos datos que nos gusta dar a todas las madres), sano y comilón, al que no me canso de mirar a cada momento y que está haciendo mi vida más feliz aún si cabe.

Ambos estamos bien, conociéndonos cada día y aprendiendo a vivir el uno con el otro.

Estos primeros meses serán muy intensos y por un tiempo dejaré de ser dueña de mi tiempo. Aún así, intentaré escribir tanto como me sea posible, aunque si queréis saber más de mí, ya sabéis que me tenéis en twitter.

A todos los que, de un modo u otro me habéis felicitado, muchas gracias. Ya estoy de vuelta, aunque sea poco a poco.